Oh, glorioso apóstol San Judas Tadeo, santo poderoso y lleno de misericordia, tú que nunca dejas sin respuesta a los que claman a ti en su desesperación, y tú que eres el protector de los que buscan refugio en la fe.
Reconocemos, San Judas, tu incansable labor de intercesión. Tú, baluarte de los que enfrentan tempestades en el mar de la vida, eres el defensor de los que buscan con fervor el consuelo divino. Tu nombre resuena como un faro en la oscuridad, guiándonos hacia la luz de la esperanza.
Hoy,en nombre de esta comunidad,te suplicamos,San Judas Tadeo,que fortalezcas nuestra fe. Que la unidad que nos une se funde en una roca inquebrantable de confianza en Dios. Que nuestras oraciones, elevadas con un mismo corazón, se conviertan en un himno de alabanza y acción de gracias.que las adversidades, que puedan agitar nuestro camino, sean superadas con la fuerza de la comunidad, unidos en la oración.Fortalece el vínculo que nos une, que nuestras diferencias se disuelvan en la comunión fraterna y el amor al prójimo.
Te pedimos que inspire nuestro compromiso y que brille en cada uno de nosotros la llama de la fe, para que podamos ser testimonio de la bondad y el amor divino. Que, con tu poderosa intersección, la armonía y la comprensión reine entre nosotros, nutriendo la confianza y la fraternidad comunitaria.
Por tu divina intersección, San Judas, amén.
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