Oh, glorioso apóstol San Judas Tadeo, poderoso intercesor y lleno de misericordia,
Tú que nunca dejas sin respuesta a los que claman a ti en su desesperación, y que sabes acompañar las ansias de los corazones con tu inigualable gracia, te invocamos hoy con fe y esperanza. A ti, patrono de las causas difíciles y desesperadas, acuden aquellos que buscan la armonía en sus relaciones.
San Judas Tadeo, tú que comprendes la fragilidad de los lazos humanos y el poder de la discordia, te ruego que ilumines mi camino en este momento de dificultad, que alivies mi corazón y me ayudes a encontrar la paz y la comprensión en mis relaciones. Que la comunicación fluya con claridad y amor, que el entendimiento supere las diferencias y que la amistad se fortalezca en el respeto y la empatía. Ayúdanos a construir puentes de reconciliación, a sanar las heridas y a cultivar el amor en cada interacción. Te pedimos que escuches el clamor de mis seres queridos y el mío, que ilumines nuestros corazones y nos concedas la sabiduría para resolver las dificultades con amor y respeto mutuo.
Te prometo llevar a cabo la labor de la reconciliación con la misma devoción con que te pido tu ayuda y difundir la devoción a tu nombre.
Por tu divina intersección, San Judas, Amén.
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